segunda-feira, 21 de janeiro de 2008

oh padre que me guardas
de las inquietudes del mundo
y entre los animales

me concedes el don de la espera
y el conocimiento del dolor

(condición de todo el que respira)

y me recuerdas en el viento
a mi mano tan lenta

los días frágiles
de mi corazón

(Trad. de Maria Angeles Ludeña)